El COE provincial redacto una resolución para que la Capital de Salta vuelva a fase 1, teniendo en cuenta el aumento de casos positivos de coronavirus. Finalmente, este documento no habría recibido la aceptación del Poder Ejecutivo y la resolución no entrará en vigencia.
La resolución establecía diversas restricciones para el ejido capitalino. En este contexto, el mismo Arzobispado de Salta emitió un comunicado para informar que se suspendían las actividades católicas en Capital.
Toda esta operación habría sido impulsada por el COE, descontando que el gobernador estaría de acuerdo, cosa que finalmente no sucedió. Esta supuesta “filtración de la resolución ” no hace mas que restarle credibilidad al COE salteño.
Lamentable.