En septiembre se conoció la trágica noticia de que Gabriel Olivera, exdirector de Discapacidad del municipio durante la gestión de Miguel Isa, había fallecido producto de las lesiones tras impactar contra un arreglo mal señalizado en el barrio Solís Pizarro.
Desde alli el Cuerpo de Investigaciones Fiscales intervino en la muerte y también la Municipalidad tomó cartas en el asunto al evaluar el rendimiento de la empresa que tenía a su cargo esa reparación.
Comenzaron a aparecer numerosos reclamos de vecinos por la demora en la reparación de roturas de calles como así también de bacheos dejados a medio hacer que resultaron ser de la misma empresa, por lo tanto, la Municipalidad definitivamente cortó relaciones contractuales con la misma.
Se trata de la empresa Mendoza, tercerizada para diversas obras como tantas otras que se ocupan de cumplir con los contratos, y que resulta ser del hermano del concejal capitalino saencista Víctor Costanzo, conocido por ser crítico feroz de la gestión municipal en materia de pavimentación.
A la empresa se le labró un acta y se la multó, además de cortar el vínculo definitivo con la comuna y, de hecho, afirman desde el municipio, no volverán a trabajar más mientras siga la gestión de Bettina Romero.
